La silla vacía

Categorías:
silla vacía

Este año por primera vez tu silla estará vacía, el lugar en el que acostumbrabas estar lucirá sin ti.

Qué difícil será aceptar tu ausencia, tus gustos, tus afectos y todo aquello que le daba un sabor muy especial a estas reuniones.

No nos acostumbraremos jamás a estar sin ti, siempre quedará ese espacio y ese lugar que te pertenecerá para siempre.

Te extrañamos y nos duele tu partida, jamás pensamos que esto sucedería, ahora sólo nos queda el recuerdo y esa fotografía donde te veías con tanta alegría, con tanta vida.

Queremos creer que te fuiste de viaje y que en algún momento cruzarás la puerta y con tu sonrisa nos darás esos abrazos que sólo tú sabías dar, tan efusivos, tan sinceros, tan reales.

La realidad nos recuerda que tu tiempo en este mundo ha finalizado, que jamás volverás a sentarte ahí.

Nos queda sólo el recuerdo de tus pasos, de tus gustos, de eso que llamamos vida, cuánto dolor hay en toda la casa.

La esperanza de saber que un día estaremos nuevamente juntos me alegra y para ser sincero me consuela hasta sentirme en paz en medio de este dolor, pero no puedo negar la profunda tristeza, mi incesante dolor.

“No temas, pues yo estoy contigo; no te angusties, pues yo soy tu Dios; yo te fortalezco y te ayudo, y te sostengo con mi brazo victorioso”
Isaias 41, 10

Nostalgia,
soledad,
tiempo…

Cuántas cosas nos dice y recuerda el silencio de tu silla vacía.

 

Quiero comentar

Por favor, procura que tus comentarios estén relacionados con este contenido. Recuerde que tu comentario será revisado antes de publicarse. Los comentarios fuera de tema, los promocionales, o aquellos que resulten ofensivos para los usuarios de la web serán eliminados.